STABAT MATER
Introducción
En estas fechas alrededor de la Semana Santa acostumbramos a dedicar un tiempo a recrearnos con alguna de las maravillosas Pasiones de Johann Sebastian Bach, y quien tenga tiempo debe hacerlo porque siempre son un regalo para el espíritu y el oído. Hoy, sin embargo me he decantado por recuperar alguna de las versiones del Stabat Mater que hemos ido publicando en fechas anteriores y hablar de esta composición.
Stabat Mater dolorosa
Estaba la Madre dolorosa es la traducción del latín. Se trata de un poema medieval adoptado en el servicio religioso católico en las celebraciones de la Virgen Dolorosa. En este caso, los diez primeros versos del poema conformarían el himno de vísperas, los cuatro siguientes el himno de maitines, y los seis últimos el de laudes. Aparece además en algunos devocionarios y en ocasiones es cantado como motete para ciertos momentos litúrgicos distintos de la secuencia. Comienza con las palabras Stabat Mater dolorosa («Estaba la Madre dolorosa»). Como plegaria, medita sobre el sufrimiento de María, la madre de Jesús, durante la crucifixión de su hijo.
De autoría desconocida se atribuye al poeta franciscano italiano Jacopone da Todi (1306).
El texto describe a la madre de Cristo al pie de la cruz, que era uno de los temas predilectos de la piedad medieval. Este mismo tema se ha visto abordado en canciones vernáculas inglesas contemporáneas.
Los cantos llanos señalados en los libros modernos de la liturgia para la secuencia al parecer datan del siglo XV.
Versiones
Como he dicho, el Stabat Mater de distintos compositores ha estado presente en estas páginas. Recordemos por ejemplo los de Rossini, Verdi, Poulenc, Pergolesi, Jenkins y Dvorák.
Hoy para completar todo este elenco de versiones del Stabat Mater vamos a oir un fragmento del que compuso Antonio Vivaldi. Fue compuesta por encargo para la fiesta patronal de la iglesia de Santa Maria della Pace en Brescia, en 1712.
De ella escucharemos el Eja mater, fons amoris con el contratenor Andreas Scholl.