Es una anécdota de la divina Maria Callas, que aunque sea divina también tenía sus defectillos. Entre ellos algún desliz en la pronunciación. Ocurrió en el estreno de unos «Puritani», en 1949, cuando por exceso de trabajo, suponemos, no tuvo mucho tiempo de pulir su italiano. En el aria del primer acto, en lugar de decir «Son vergin vezzosa» (soy una virgen hermosa) lo que en realidad soltó fue «son vergin viziosa» (soy una virgen viciosa). Tal vez algún espectador esperaba una nueva versión de la opera de Bellini, después de oir esto, pero no. La interpretación de María Callas fue tan excepcional que el público le hubiera perdonado ese y otros mil defectos de pronunciación.
Esta anécdota justifica volver a escuchar de nuevo esta aria.
En primer lugar, en un audio de la mismísima María Callas: «Son vergin vezzosa» I Puritani
Y dado nuestro gusto por incluir videos, este es de Anna Netrebko en «Son vergin vezzosa»