En el momento en que en la ópera de Giacomo Puccini, Madama Butterfly, suena este Coro a bocca chiusa (boca cerrada), la protagonista junto a su hijo y su sirvienta Suzuki están esperando la llegada de Pinkerton.
Es un momento mágico al final del segundo acto. En él, Cio-Cio-San, ha defendido siempre su esperanza en el regreso de su amado Pinkerton, algo que pocos creían. Cuando ella ve llegar el barco que lo trae de regreso, su alegría es inmensa: estaba en lo cierto y los demás se equivocaban. Pero la realidad será otra, Pinkerton ha vuelto, pero no como ella espera, y ese momento de música suave que acompaña el atardecer no va a traer la felicidad al día siguiente.
El Coro a bocca chiusa, que interpretan los pescadores, de Madama Butterfly es un momento de calma antes del trágico final de la joven japonesa.
Coro a bocca chiusa M. Butterfly